Dejar atrás el pasado no es fácil, especialmente cuando estamos programados para aferrarnos a la certeza, pero hacerlo no ayuda. En este artículo te explicamos nueve formas en las que puedes aprender a dejar atrás el pasado para siempre y seguir adelante con tu vida.
Dejar atrás el pasado es uno de los desafíos más difíciles que enfrentamos la mayoría de nosotros en un momento u otro. A veces nos aferramos a relaciones que se fueron hace mucho tiempo. Echamos de menos a nuestros seres queridos que han fallecido y no podemos aceptar el hecho de que ahora son nuestro pasado. Otras veces, podemos aferrarnos a nuestros éxitos anteriores y no darnos cuenta de que ya no estamos en la cima de nuestro ciclo vital. Muy a menudo, no podemos dejar de lado los rencores y las heridas del pasado.
Si alguna vez tuviste un sueño, una ambición, un plan que ahora no parece ser realista, sabes lo difícil que es dejarlo ir. Sin embargo, aferrarse al pasado, ya sea malo o bueno, te hace incapaz de vivir en el ahora. Limita tus posibilidades de crecimiento y transformación. Entonces, ¿cómo puedes dejar atrás el pasado y por qué deberías hacerlo?
¿Por qué no podemos dejar ir el pasado?
Estamos inevitablemente expuestos a pérdidas a medida que pasan el tiempo y los acontecimientos. No queremos, y muchas veces no sabemos cómo, dejar atrás el pasado. Sin embargo, la realidad de la vida nos obliga a hacerlo.
Imaginemos una historia ficticia. Entre todas las cosas materiales e inmateriales que tuve que dejar ir, descubrí que lo más difícil de abandonar era mi yo del pasado. Cuando tenía 28 años, hice un corte quirúrgico preciso de mi vida (por la razón equivocada). Simplemente me desvinculé de absolutamente todo lo que una vez comprendió mi existencia. Vendí mi piso y todas mis cosas, me mudé a otro país, corté lazos con todos mis amigos, dejé mis pasatiempos, abandoné mis ambiciones e intereses, cambié mis hábitos. Otorgué mis pensamientos y recuerdos a una persona que los distorsionó crudamente e impuso una perspectiva extraña en mi mente.
Para resumir, siete años después, descubrí que no puedo recuperar todo eso. Poco de mi antigua vida podría ser restaurado por una razón u otra. Lo más importante, he cambiado. Y me he dado cuenta de que añoro dolorosamente algunas partes de mi antiguo yo.
Después de darme cuenta de eso, pasé otro año anhelando profundamente sentirme como antes. Sentí que dejar atrás el pasado en ese momento significaría que había renunciado a cualquier posibilidad de volver a sentirme como yo.
Lo que experimenté está respaldado por hallazgos científicos. Las investigaciones confirman que tendemos a aferrarnos a las cosas porque las sentimos como parte de nuestra identidad. Si los dejamos ir, podríamos perdernos a nosotros mismos. Sé que he temido esta opción a menudo.
La investigación científica ha revelado que cuanto más nos conocemos, más nos gustamos. Entonces, tal vez te conozcas a ti mismo como una persona que está en una relación con cierta persona. O bien, podrías definirte como alguien que tiene “ese” trabajo específico, incluso si lo odias. Entonces, si sueltas esas cosas, ¿quién serás, quién eres? ¿Y te gustarás a ti mismo?
En otras palabras, no importa cuán horrible sea la experiencia que estemos viviendo, es algo que sabemos sobre nosotros mismos. Por esta razón, generalmente no sabemos cómo dejar atrás el pasado. De hecho, estamos programados para aferrarnos. Se siente familiar. Se siente seguro. Los seres humanos necesitamos certeza, y gran parte de nuestras instituciones, tradiciones e interacciones giran en torno a esta necesidad. Esta es la razón por la cual el arte de dejar ir es tan difícil de dominar.
Cómo dejar atrás el pasado: nueve consejos
Cuando decidas que es hora de refrescar tu mente y dejar atrás el pasado, es posible que te falten las habilidades para hacerlo. ¿Dónde empezar? ¿Cómo dejar ir de manera efectiva? Aquí hay nueve consejos para ayudarte a dominar el dejar atrás el pasado y convertirlo en tu nueva filosofía de vida.
1. Escribir un diario o hablar con alguien
A veces estamos demasiado en nuestras cabezas para poder dejar ir. A menudo he descubierto que las cosas a las que me aferro siguen siendo poderosas porque las mantengo en mi mente de alguna forma intangible. Tan pronto como hablo de ellos o los escribo, empiezan a perder el control que tienen sobre mí.
Cuando tratamos de dar a nuestras emociones la estructura suficiente para comunicarlas o escribirlas, comenzamos a analizarlas utilizando procesos cognitivos superiores. Los sacamos de un ámbito puramente afectivo. A menudo, esto es suficiente para ayudarte a ver una imagen más clara y reconocer que estás listo para liberarte del pasado y seguir adelante.
2. Abandona la necesidad de ir de superhéroe
Cuando alguien nos lastima (o nos agravia por la injusticia de la vida), podemos reflexionar sobre ello durante meses, incluso años. Y cuando reflexionamos sobre el insulto repetidamente, fortalecemos su efecto sobre nosotros. Se vuelve más importante, una parte de lo que somos. Ponemos el dolor en el centro de nuestra experiencia.
Como consecuencia, nos exponemos al riesgo de caer en una depresión, tal y como han determinado ciertos estudios de imagen cerebral. Por lo tanto, dejar ir el pasado significa detener los esfuerzos por ir de superhéroe. Sí, fuiste maltratado. Haz las paces con eso y sigue adelante.
3. No dejes que los demás te definan
A veces no sabemos soltar el pasado porque sentimos que los demás nos hicieron algo. Por lo tanto, esperamos que otros también lo arreglen.
Sin embargo, el arte de soltar es, al mismo tiempo, el arte de recuperar el control. Puedes elegir cómo reaccionar, sin importar lo que hagan los demás y lo que te suceda a ti. Tú decides cuándo es suficiente y cuándo seguirás adelante.
4. Conviértete en optimista
Los humanos están más inclinados a prestar atención, aprender y usar información negativa mucho más que positiva. Además, cuanto más nos enfocamos en algo, más se convierte en nuestro hábito de pensarlo y verlo en nosotros mismos.
Entonces, se deduce que es más beneficioso desarrollar una perspectiva optimista. Comienza a crear un futuro atractivo para ti. Harás que dejar atrás el pasado sea mucho más fácil, porque tendrás algo mejor hacia lo que avanzar.
5. Perdónate a ti mismo
Uno de los obstáculos más difíciles a la hora de dejar atrás el pasado es perdonarte a ti mismo. Incluso cuando te las arreglas para liberar rencores contra los demás, una autoculpa residual puede impedir que realmente sigas adelante.
Entonces, cometiste un error: eligiste a la persona inadecuada como cónyuge, te decidiste por una carrera laboral insatisfactoria, juzgaste mal las situaciones y tomaste el camino equivocado. Está bien, todos nos equivocamos. Acéptalo y sigue adelante. Porque el único error que estás cometiendo en este momento es no dejar atrás el pasado. Y eso es algo que puedes cambiar ahora mismo.
6. Desarrolla la capacidad de estar presente
Practicar la atención plena, el famoso mindfulness, o estar presente en el momento, es una habilidad vital, especialmente cuando se trata de liberar el pasado. Sin embargo, al mismo tiempo es una idea que muchos de nosotros encontramos difícil de construir. Eso es porque mucha gente se enfoca en el pasado o en el futuro.
Desarrolla tu habilidad para estar conscientemente presente en el ahora. Con el tiempo y la práctica, tu mente adquirirá el hábito de reconocer dónde (y cuándo) ocurre realmente tu vida y el pasado permanecerá donde pertenece.
7. Crea distancia con el pasado
Dejar ir el pasado puede parecer imposible simplemente porque permanece demasiado involucrado con sus recordatorios. Mi padre solía comparar situaciones similares con tener la mano atrapada en una picadora de carne mientras lo único que haces es tomar analgésicos: hasta que retire la mano de lo que está causando el dolor, realmente no está haciendo nada para resolver el problema.
Por lo tanto, siempre que sea posible, considera formas de crear una distancia psicológica o física de los eventos, relaciones o situaciones pasadas que necesitas dejar atrás. Tal vez necesites alejarte de un área para evitar a un amante anterior o a un familiar separado. O tal vez dejar de ir a ese bar en el que te encantaba pasar el rato con tu antiguo mejor amigo. No volver a ese lugar todo el tiempo te ayudará a dejar atrás el pasado.
8. Reconoce que dejar atrás el pasado significa crecimiento
Imaginemos que cuando me costaba dejar atrás el pasado, era porque temía perderme a mí mismo. Prácticamente borré mi vida y viví así durante años. Después de que terminé con eso, comprensiblemente, tuve una fuerte necesidad de recuperar mi antiguo yo.
Sin embargo, después de un tiempo, me di cuenta: mi antiguo yo había desaparecido. Y esto está bien. Algunas partes sobrevivieron y resurgieron después de que me recuperase. Constituyen mi núcleo psicológico. Otros se han ido para siempre. Aun así, no debería llorarlos para siempre. Nada permanece igual, ni siquiera nosotros.
Entonces, en lugar de apegarse al pasado y afligirse, acepta el cambio como crecimiento. Toma tus experiencias y transfórmalas en algo más grande de lo que eras antes.
9. Crea rituales de empoderamiento
Cuando está aprendiendo a dejar atrás el pasado, crear rituales saludables y fortalecedores puede ayudarte. Participa en el autocuidado . Come sano, descansa, haz ejercicio, lee, medita o reza. Ámate y elógiate a ti mismo. Al hacerlo, estás construyendo tu confianza y un sentido de ser merecedor de las cosas buenas que se te presenten. Comenzarás a vivir con atención y a mirar hacia el futuro con seguridad y curiosidad, en lugar de quedarte atrapado en experiencias pasadas.
Dejar atrás el pasado para abrazar el futuro
Aprender a dejar atrás el pasado no es tarea fácil. Prepárate para ser desafiado cada vez que enfrentes la necesidad de hacerlo. De hecho, tu estructura psicológica innata probablemente se opondrá firmemente a dejar atrás el pasado. Eso es porque nos gusta aferrarnos a cosas, experiencias y personas, incluso cuando sin duda son malas para nosotros.
Sin embargo, cuando logras reconfigurar tu mente y aprendes a entregar el pasado cuando llega el momento de hacerlo, aprendes a vivir la vida al máximo. ¿Cómo? Al abrirte a las oportunidades. A lo que viene después. Crecer. Entonces, comienza hoy. ¿A qué te has estado aferrando que necesita ser liberado?
Sobre mí
Psicólogo en Valencia | Julio García
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